Puerto Toro, en el extremo este del canal Beagle, es una pequeños localidad alejada de las
principales ciudades de la región de Magallanes, a la que se accede por vía marítima y donde
funciona el recinto educativo más austral del mundo, la escuela Puerto Toro.
En este establecimiento las condiciones de trabajo son complicadas: el aislamiento, el difícil
acceso y las bajas temperaturas, principalmente en invierno, transforman en un desafío la
llegada de las herramientas necesarias para mejorar la educación, especialmente en
materia de infraestructura.
Por esa razón, al recibir la petición de una nueva caldera para la escuela, el Servicio Local
de Educación Pública Magallanes inició las gestiones para adquirir el equipamiento que
costó 10 millones 400 mil pesos, financiados por el Fondo de Apoyo a la Educación Pública
(FAEP).
La instalación del nuevo equipamiento se realizó bajo la supervisión de una profesional de
la Subdirección de Infraestructura y Mantenimiento del SLEP Magallanes para dar paso a
las pruebas de operación. Finalmente, la nueva caldera quedó funcionando en el
establecimiento.
“Muchas gracias por el regalo que nos dieron, la verdad es que lo necesitábamos mucho
para la escuela porque vendrá el invierno y nos va a ayudar a ir a las clases”, declaró Ángel
Concha, estudiante de la escuela Puerto Toro.
El profesor encargado del recinto, Iván Bustos, comentó que “agradecemos mucho la
gestión y la logística tremenda que hizo el Servicio Local de Educación Pública Magallanes
al poder comprarnos una caldera nueva para enfrentar el duro invierno que se nos viene”.
Si bien apenas hay dos estudiantes en el establecimiento, la tarea de educarlos es mucho
más complicada que en otros lugares dado el aislamiento, y eso es algo que el profesor
encargado ha ido aprendiendo.
“He encontrado aquí que hay una única realidad, una realidad singular, en donde
necesitamos el apoyo y cooperación de todas las personas de la comunidad y encontrar la
manera de integrarlos a todos y a todas. Es un desafío que me gusta, porque siento que
estoy acá colaborando en el aporte directo a la cultura y a hacer patria también”, comentó.
La escuela fue fundada en 1971, aunque se desconoce la fecha exacta de su inauguración,
por lo que celebran su aniversario junto al de la localidad de Puerto Toro, es decir, cada 26
de noviembre. En la actualidad el establecimiento tiene dos alumnos, Ángel de 10 años y
que cursa quinto básico y Franco, quien tiene 13 años y va en octavo básico.