En la Iglesia Catedral, el administrador apostólico y renunciado obispo de Magallanes, Bernardo Bastres, celebró la misa de la asunción de la Virgen y la vida religiosa femenina, donde estuvieron presentes religiosas y comunidades educativas para recordar la importancia de la virgen María en el llamado al servicio solidario de los más necesitados.
Dijo que sin duda que para el nuevo obispo, que viene de una nueva congregación religiosa, será un desafío donde pidió a los feligreses recibirlo con cariño y respeto.
Esta semana llegará a la zona, donde tendrá encuentros privados con los religiosos de la zona. Destaco los eventos de los 500 años de la primera misa en Chile y de la labor de la casa samaritano y de las canasta para quienes más han sufrido en época de pandemia. Igual dijo que tiene la fe que habrá nuevos jóvenes con la vocación del llamado de cristo. Igual en so homilia pidio por la unidad y que la gente pueda elegir con su corazón el destino de nuestra patria de cara a la elección del 4 de septiembre.