La deserción escolar es una de las preocupaciones permanentes del Ministerio de Educación, y lo es aún más en el contexto de pandemia. Aunque se han implementado una serie de mecanismos que han permitido recuperar estudiantes y que evitaron que la deserción no aumentara dramáticamente entre 2020 y 2021, la amenaza latente de que nuevos niños, niñas y jóvenes queden excluidos del sistema motivó al gobierno a poner mayor urgencia al ingreso del proyecto que crea una Nueva Modalidad Educativa de Reingreso Escolar.
Esta iniciativa se venía trabajando desde fines de 2018 entre el Ministerio de Educación y el Consejo Nacional de Educación (CNED), con el objeto de crear un nuevo espacio que disminuyera las dificultades de adaptación que enfrentan hoy los estudiantes excluidos -de entre 12 y 21 años- al tener la educación de adultos como única opción para completar su trayectoria educativa.
el seremi de Educación de Magallanes, Rodrigo Sepúlveda Tagle, valoró esta iniciativa porque “esta modalidad busca dar una respuesta en condiciones de equidad y calidad a todos los estudiantes del sistema, independiente de sus circunstancias, corrigiendo la discriminación en el financiamiento respecto de los niños y jóvenes”, agregó.
Junto a lo anterior, Sepúlveda recordó que, a nivel nacional, actualmente hay 179.893 estudiantes que se encuentran fuera del sistema escolar según la tasa de prevalencia de la deserción. Esta tasa calcula la proporción de estudiantes que figura en el sistema al menos un año en el periodo 2004-2020 y que, sin haber egresado de 4° medio, no se encuentra matriculado el año 2021. En la región de Magallanes son 1.379 los estudiantes que están fuera del sistema escolar.
¿Quiénes podrán acceder a esta nueva modalidad?
Todos los niños, niñas y adolescentes entre 12 y 21 años que, habiendo estado matriculados previamente en el sistema escolar chileno se encuentran hoy fuera del sistema escolar por más de dos años por diversos motivos asociados a contextos de vulnerabilidad personal, familiar y/o exclusión social.
Estos estudiantes, que son cerca de 99 mil niños, niñas y jóvenes de entre 12 y 21 años, que forman parte de los más de 180 mil que se encuentran excluidos del sistema escolar desde los 5 a los 21 años, pueden ingresar a dos programas de la modalidad:
Recompromiso Educativo: Busca restaurar el vínculo educativo del estudiante para que continúe con su proceso educativo. Está dirigido a estudiantes entre 12 y 21 años que podrán reingresar en la educación regular o continuar su proceso educativo en el programa de reingreso escolar.
Reingreso Escolar: Está orientado a estudiantes de entre 16 y 21 años y tiene por finalidad permitir a los estudiantes completar su educación escolar, ofreciendo distintos subprogramas de formación que pueden ser humanístico-científico, técnico profesional, de oficio o de certificación de competencias.
La subvención por estudiante será de más de $130 mil en estos nuevos espacios, que se constituirán en una jornada diferenciada en los Centros de Educación Integrada de Adultos (CEIA), o en aulas de reingreso ubicadas en establecimientos de educación regular.