La mañana de este lunes (19 de octubre), la alcaldesa (S) de Punta Arenas, Elena Blackwood, junto a la jefa del área Salud de la Corporación Municipal, Rosa Bidart, se reunieron con dirigentes vecinales, funcionarios y la directora del Cesfam 18 de Septiembre, para analizar los pasos a seguir, luego de enterarse la semana pasada sobre el complejo escenario al que se enfrentan trabajadores y usuarios del recinto por los problemas de financiamiento que existen para llevar adelante el contrato de licitación.
Según indicó la jefa del área Salud de la Cormupa, Rosa Bidart, el jueves pasado se le informó mediante una videoconferencia, que la empresa Salfa había ofrecido $11 mil millones y el Servicio de Salud sólo tenía $7 mil millones. Además, hasta la fecha, no ha existido un informe oficial hacia el Municipio respecto de esta situación ni sobre las acciones que se tomarán.
“Nosotros desde el Municipio, obviamente hemos tomado esto con una gran preocupación y molestia, porque sabemos que es un recinto que la población 18 de Septiembre necesita, es una ilusión que han llevado por más de 10, 12 años, y que una vez más no se pueda concretar por supuesto que nos ha dejado muy preocupados y esto es lo que vamos a hacer ver a la señora intendenta”, afirmó la alcaldesa (S), Elena Blackwood, indicando que esperan poder reunirse con la primera autoridad regional a más tardar este martes (20 de abril).
Por su parte, la jefa del área Salud de la Cormupa, Rosa Bidart, indicó que “es una preocupación, primero, por los funcionarios, que son más de cien que no entran en el Cesfam y que están trabajando en terreno. Nosotros tenemos vehículos con conductores, pero hay gente que sale en sus propios autos. Por lo tanto, también es un gasto mayor para cada funcionario. Y además, la atención de nuestros usuarios que no la podemos dar al cien por ciento, en lo que debiera ser presencial en este Cesfam”, agregando que el recinto cuenta con más de 17 mil usuarios inscritos.
Finalmente, la directora del Cesfam 18 de Septiembre, Ximena Paredes, se manifestó molesta y decepcionada porque junto al anuncio de los problemas de financiamiento, se les indicó que debían ser ellos mismos los que buscaran un lugar transitorio para poder estar mientras se construía el nuevo recinto. “Se nos dijo que por el problema de presupuesto, había que ver otra alternativa, sobre todo en lo relacionado con el Cesfam transitorio, porque como se va a construir en el mismo sitio, hay que demoler este establecimiento. Entonces nos pidieron que nosotros viéramos el plan alternativo”, explicó.
De haberse realizado todo según lo esperado, en noviembre debería haber estado construido el Cesfam transitorio para que los funcionarios pudieran operar ahí, mientras se iniciaba la demolición y construcción del nuevo recinto, que tenía una duración de 2 años.