Municipio volvió a querellarse por nuevo mortal ataque de pitbull a mascota

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En menos de una semana, nuevamente otro ataque de un perro de raza pitbull se volvió a registrar en la comuna, esta vez, al interior de las instalaciones del Condominio San Ignacio. Según el registro de una cámara del edificio, el ataque ocurrió en uno de los pasillos donde el can se abalanzó sobre un pequeño perro de raza Yorkshire, causándole graves lesiones que le provocaron más tarde la muerte.

Es por esto que, durante la mañana de hoy viernes, la Municipalidad de Punta Arenas interpuso una nueva querella criminal por el delito de Maltrato Animal en contra de la dueña del animal atacante. De esta manera, el alcalde Claudio Radonich en compañía de la propietaria de la mascota fallecida y del abogado del municipio, Michael Furniss; presentó las acciones legales en los tribunales de justicia. 

«Nuevamente estamos en un lugar en el cual no quisiéramos estar, producto de un perro que atacó a una mascota pequeña, dándole muerte. El can agresor estaba sin bozal y a cargo de una persona que no lo pudo contener. La pregunta es cómo nuevamente una persona mete a un perro potencialmente peligroso a un lugar común donde pasan niños, vecinos adultos y mascotas. Lamentablemente la Ley Cholito, para esto, es muy general y no hay una solución rápida«, señaló el jefe comunal.

En este mismo sentido, el edil indicó que «lo que vivió Monserrat, dueña de esta mascota fallecida, fue muy duro y esperamos que la justicia pueda hacer su pega rápida, pero también, que la ley pueda mejorarse para que estos casos puedan tratarse de manera más expedita», remarcó el edil, quien añadió que «quiero darle las gracias a Monserrat que ha tenido el carácter y la fuerza para compartir su vivencia y poder hacer un llamado a los vecinos que tienen este tipo de perros, donde la culpa no es del animal, sino del dueño». 

Por su parte, Monserrat Barría, propietaria de «Toto», mascota víctima del ataque, afirmó que «lo único que estoy pidiendo es justicia, porque estos animales no tienen la culpa, sino sus dueños, y quiero que estas personas no tengan más perros», señaló la afectada, quien añadió que «yo solamente pido ya no tener más miedo de poder bajar por las escaleras y que me ataque a mí o a mis hermanos; esta vez fue mi perro, mañana podría ser un niño», concluyó Barría.

En tanto, Michael Furniss, abogado del municipio, explicó que «esta es una querella por el delito de Maltrato Animal 

por omisión a los reglamentos por parte de la dueña del perro pitbull, por encontrarse este animal circulando en un edificio sin contención ni bozal, lo que derivó finalmente en el ataque y muerte de «Toto», el perrito de Monserrat».

Sumado a lo anterior, Furniss explicó que «nosotros estamos pidiendo que se remita la querella al Ministerio Público para su investigación, y así finalmente se condene a la dueña de este can, a las penas que corresponden por este delito que son de presidio menor en su grado medio que va de los 541 días a los 3 años de cárcel, sumado a la pena accesoria de inhabilitación absoluta y perpetua para tener animales de este tipo».