Nota de la Opinión Austral_
Las horas pasan y el paradero de una víctima de trata de explotación sexual es desconocido, tras haber ingresado a Chile, desde el Paso Integración Austral, donde rescataron a tres de sus compañeras.
Se trata del caso de una joven de Paraguay que había pasado al vecino país, a bordo de un micro de larga distancia de quien, hasta entrada la tarde del viernes, nada se sabía de ella ya que sus “apropiadores” habían sido detenidos por el personal de Gendarmería Nacional en ese paso fronterizo en la jornada del lunes pasado.
Se trata de cuatro mujeres de entre 20 y 29 años de edad que habían sido captados en su país de residencia y que, mediante viajes de avión y vía terrestre, habían llegado al sur de la Argentina con el fin de llegar a Punta Arenas con una oportunidad laboral como “coperas” en esa ciudad.
La maniobra fue detectada el pasado viernes y, por el caso, dos mujeres y un hombre fueron demorados e indagados tras una fuerte sospecha del delito de “trata de personas con fines de explotación sexual“. Las sobrevivientes habían sido trasladadas desde Curuguaty, Paraguay, pasaron a Ciudad del Este, luego a Iguazú, desde ahí, en avión a Buenos Aires y luego en autos hasta Río Gallegos.
Los acusados, dos mujeres y un hombre, fueron alojados en diferentes dependencias de las fuerzas. El hombre fue alojado en la Comisaría Tercera de nuestra ciudad capital, mientras que las mujeres están en las instalaciones de Gendarmería Nacional.
Fuentes consultadas por La Opinión Austral, indicaron que la cabecilla de la banda (quien cuenta con un local nocturno en Punta Arenas) fue la única que se negó a declarar, mientras que los restantes dos aseguraron no tener conocimiento del hecho y desconocerlo por completo.
Las primeras averiguaciones dan cuenta de un intercambio de mensajes entre una mujer y la principal sospechosa. “Necesito trabajar” asevera la vecina de quien no se conocen otros detalles, a lo que la imputada le dijo: “no tengo lugar, estoy trayendo cuatro chicas de Paraguay“. Como dato, trascendió que, desde Paraguay a Río Gallegos, les habían dado solo nueve mil pesos a cada una de las víctimas.
Más allá de eso, en un trabajo interfuerza entre Gendarmería y la PDI de Carabineros, buscan a la cuarta víctima que se encontraría en Punta Arenas. El resto de las jóvenes ya fue contenida por el personal del Ministerio de Igualdad.
Fuente: LA OPINIÓN AUSTRAL