Durante el mes de septiembre la región de Magallanes comienza a recibir más turistas, es por esta razón que desde el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura, junto a otras instituciones como la Armada de Chile, Carabineros y Aduanas han intensificado acciones de fiscalización en torno a la pesquería de centolla, un recurso muy apetecido de la región.
Diferentes operativos de fiscalización han logrado detectar almacenamiento y tenencia del recurso de origen ilegal, además de redes a bordo de una embarcación, arte de pesca ilegal para extraer el recurso. La centolla debe capturarse con trampas y tanto los centollas que no cumplen con el tamaño mínimo legal, como las hembras que siempre están en veda, deben ser devueltas al mar.
En Porvenir se encontraron 49 potes de carne de centolla refrigerada a bordo de una embarcación, mientras que en el aeropuerto de Punta Arenas se realizó un hallazgo de 33 potes de centolla transportados por pasajeros que no contaban con la documentación para acreditar el origen legal, y finalmente en un procedimiento de inspección a una embarcación pesquera en el muelle de Puerto Natales, se encontraron 1.000 metros de redes centolleras.
Se incautó el total de los potes con centolla procesada además de los 1000 metros de redes centolleras y se cursó una citación al armador de la embarcación.
El Director Regional de Sernapesca Magallanes, Patricio Díaz, hace un llamado a la comunidad a comprar recursos del mar en lugares establecidos donde puedan acreditar el origen legal de los productos que compran. “La elaboración clandestina de centolla normalmente se hace en base a recurso hembra o juveniles, los cuales se encuentran protegidos por la normativa para asegurar la sustentabilidad de la pesquería. Además, al no tratarse de producto elaborado en un lugar autorizado, implica también un riesgo para la salud,” aseguró.