Durante la tarde del 26 de noviembre el Servicio de Búsqueda y Salvamento Marítimo Punta Arenas (MRCC Punta Arenas), dependiente de la Gobernación Marítima, activó el despliegue de dos operativos marítimos, en el Canal Beagle y en el Cabo de Hornos.
Es de esta manera que la Tercera Zona Naval dispuso el zarpe, prácticamente en simultáneo, del PSG 78 “Sibbald” y el la LSG 1603 “Alacalufe”, unidades con Puerto Base en Puerto Williams, coordinando además la preparación de medios aeronavales para operar en la zona en caso de ser necesario.
A las 17:05 horas la LSG 1603 “Alacalufe” se dirigió al sector de caleta Santa Rosa, distante a 45 kilómetros al Este de Puerto Williams. En el lugar el velero “Maquita II” de bandera nacional con tres tripulantes, se encontraba varado sobre una roca. En el lugar los servidores navales verificaron la situación de los tripulantes, posibles averías y eventuales derrames de combustibles.
Tras la inspección inicial se pudo establecer el buen estado de los tripulantes y la embarcación, esperando la alta de marea para tractar con un bote de goma de la LSG “Alacalufe” al velero logrando exitosamente su desvarada, para posteriormente regresar a Puerto Williams, donde servidores navales de la Capitanía de Puerto continuaron con el procedimiento correspondiente.
Paralelamente el PSG 78 “George Sibbald” zarpó en dirección a Cabo de Hornos, al activarse un operativo de Búsqueda y Salvamento Marítimo tras la activación de la radio baliza del yate “Ansana” de bandera Belga.
La Unidad navegó bajo condiciones meteorológicas adversas, con rachas de viento de 100 kilómetros por hora y olas de 5 metros, estableciendo contacto visual con el yate siniestrado, el cual contaba con seis tripulantes en buenas condiciones, contando la embarcación con daños en el palo mayor.
Al verificar el PSG “Sibbald” que la tripulación y el yate no estaban en riesgo, procedió a retorno a Puerto Williams recalando a las 4 de la madrugada, siendo monitoreada la embarcación desde el MRCC en la Gobernación Marítima de Punta Arenas.
De esta manera la Armada de Chile está en alerta, prestos a salvaguardar la vida humana en el mar y la seguridad e intereses territoriales, desplegando los recursos disponibles en las aguas jurisdiccionales de la Región de Magallanes y Antártica Chilena.