Este martes comenzó a regir oficialmente la ley que permite a las parejas anteponer el apellido de la madre al del padre al momento de inscribir a sus hijos recién nacidos, norma cuya aplicación al fin ve la luz tras 15 años de tramitación en el Congreso.
El proyecto, ingresado en abril del 2006, fue aprobado y despachado en mayo del 2021, tras lo cual fue promulgado por el Presidente Sebastián Piñera el día 9 de ese mes, en el domingo del Día de la Madre. Y luego de la publicación de los reglamentos, que se concretó ayer en el Diario Oficial, hoy inició la vigencia de la histórica ley.
La decisión, que debe ser en común acuerdo entre ambos progenitores, se tiene que tomar para el hijo primogénito en común y se mantendrá para los siguientes. De no haber consenso, seguirá anteponiéndose el apellido paterno.
La norma también faculta a las personas mayores de 18 años a solicitar -por una sola vez- el cambio del orden de los apellidos que figuran en su partida de nacimiento, por la vía administrativa y no judicial, como era hasta ahora. Además, podrán solicitar por la vía judicial llevar el apellido de una abuela o abuelo.