Tras cumplir 27 años en el Poder Judicial, y seis años en la Corte de Apelaciones de Punta Arenas, el ministro Víctor Stenger Larenas se acogió a retiro al cumplir hoy –lunes 15 de noviembre-75 años, edad máxima para ejercer funciones en la institución. Con el fin de despedirlo, la Corte organizó una ceremonia online que fue encabezada por su presidenta Marta Jimena Pinto y en la que participó un centenar de personas, entre funcionarios de las diversas jurisdicciones donde sirvió, así como exalumnos que asistieron a sus clases de Derecho en Talca y Punta Arenas, familiares y amigos.
Abogado de la Universidad de Chile desde 1972, el señor Stenger ejerció libremente la profesión durante 16 años, hasta que ingresó al Poder Judicial “motivado por la necesidad de hacer algo trascendente”, como señala. A Magallanes llegó en 1995, primero como juez en Porvenir, hasta que en 2015, luego de servir en las cortes de San Miguel y Talca, en calidad de ministro en esta última, llegó al tribunal de alzada de Punta Arenas para desempeñar el mismo cargo.
Como antiguo profesor normalista de Curicó, los niños, adolescentes y jóvenes alumnos de derecho fueron parte de su vocación, especialmente los de provincias aisladas, a quienes invitó a conocer la jurisdicción en 2016. Su última actividad de vinculación con el medio estuvo dirigida a ellos, a través de un recorrido realizado en octubre por liceos y colegios de Porvenir, Puerto Natales y Puerto Williams, donde dio conferencias sobre el rol del Poder Judicial, la importancia de la educación cívica y las formas de enfrentar el bullying escolar.
Entre los reconocimientos que atesora está el premio a la excelencia académica otorgado por la Universidad de Santo Tomás de Talca y el honor de confeccionar el curso completo de Ética Funcionaria que imparte la Academia Judicial.
La ministra Marta Jimena Pinto destacó el trabajo del exministro, “siempre tendiendo a buscar acuerdos, a aunar criterios, por extremas que hubiesen sido nuestras posiciones en sala en determinadas materias o visiones sobre un caso, siempre intentando que la redacción del acuerdo tuviera la mejor expresión de lo que hubiera ocurrido para adoptarlo”.
Y agregó: “Creo que Víctor responde a una mirada filosófica del derecho, pero siempre adentrada en la realidad, porque el derecho es la vida transformada en norma y vuelta a la vida para podérsela aplicar al caso concreto. Esa es la forma de hacer de Víctor, con tanta gracia y en un solo acto”.
En su discurso de despedida, el señor Stenger recordó su última presidencia de 2020, con la pandemia declarada, y en la que tuvo que ordenar nuevas formas de funcionamiento que cuidaran a los empleados judiciales y al público, además de liderar la implementación del teletrabajo.
A modo personal, comentó que “como juez y como ministro nunca le negué una audiencia ni tramité a nadie, siempre escuché porque consideraba que nuestra labor es muy parecida a la de los médicos. Usted va al médico iba hasta que el doctor le diga algo y usted se va tranquila y en el caso nuestro es igual: muchas veces las personas quieren escuchar la voz del juez. La gente necesita a veces que se le escuche, después se van muy tranquilos, muy contentos”.