En el segundo día de revolución por parte de los dueños de restaurantes, llegaron los funcionarios de la Seremi de Salud, junto a personal Militar y de Carabineros. Intentaron que se cierren los locales, pero fueron interceptados por los propietarios de los recintos, quienes expresaron que no iban a dejar de atender al publico y que ellos procedan a aplicar las multas respectivas.
Con estos antecedentes, los funcionarios del MINSAL sacaron fotografías a cada uno de los locales y se retiraron del sector de calle O’Higgins, sin lograr su objetivo de cerrar los locales. Fue el momento en que nuevamente se llamo a las autoridades a reanudar el dialogo y llegar a un acuerdo. Todos los locatarios y funcionarios, recibieron el apoyo de los comensales que llegaron a disfrutar de las delicias de la gastronomía regional.